Ayer soñé con mi imagen tranquila mi cuerpo calmado
Mi mente llamando a lo aburrido
De un timbrado despertó mi deseo a lo malo
Agote mis energías en un pequeño rayo
Y mis deseos acabaron
Ayer quise ser malo
Quise romper promesas y acabar con mi rutina
Pero mi corazón de unos quince o dieciséis
Controlo aquella sensación con recuerdos
Denuevo quiso salir el lado oscuro
lleno de cenizas, muertos e infiernos
Recordé aquel pasaje bíblico, reí un poco
Y pensé en ironía e hipocresía
Escuche todo pero no seguí todo
Solo las paginas que me permitían
Acariciar la vida.
Y apareció la pregunta de mi vida: ¿Cuantas veces he de morir para valorar mi vida?